INTENTARON IMPEDIR LA DETENCIÓN DE UN MARROQUÍ
Una vez más el barrio de Lavapiés, en Madrid, se convierte en el escenario de incidentes entre la Policía y un grupo de vecinos, y de nuevo, por la misma razón: el arresto de una persona.
Más de cien personas acorralaron a una patrulla que intentaba detener a un marroquí denunciado, días antes, por agresiones. El arrestado se tiró al suelo y se negó a subir al vehículo policial para su traslado a comisaría.
La policía tuvo que pedir refuerzos a otras diez patrullas para poder llevar a cabo la detención. Finalmente, los agentes abandonaron el barrio en medio de insultos.
El presunto agresor ya había sido detenido en 38 ocasiones por altercados.