Vallecas
En el lugar del crimen se encontró una etiqueta de un bazar, donde los autores de los hechos compraron guantes de látex y cinta americana. Los agentes pidieron colaboración a través de Twitter para encontrar el establecimiento y resolver el caso.
La ayuda de cientos de tuiteros ha sido clave para la detención de nueve personas implicadas en el homicidio de un hombre en su domicilio de Madrid, que tuvo lugar hace un año. Los presuntos autores se dejaron una etiqueta de color naranja procedente de un bazar chino en el que habían comprado guantes de látex, cinta americana y bridas para amordazar a la víctima.
La Policía Nacional ha detenido este jueves a esas nueve personas implicadas en Vallecas. La banda asaltó una vivienda para robar una caja fuerte y sus miembros torturaron al dueño hasta matarle. Dos de estos asaltantes eran familiares de la víctima. El cadáver del dueño fue hallado en su casa, con las manos atadas con una brida y la boca tapada con cinta adhesiva.
El cadáver de este agente inmobiliario se descubrió el 28 de noviembre de 2021. La madre de Fredy -el dueño de la casa- llamó al 091 porque desde hacía varios días no tenía señales de su hijo. Solicitó a un cerrajero para que pudiera abrir la casa en número 15 de Sierra Toledana en el distrito de Puente de Vallecas. Cuando abrieron la puerta, los agentes se toparon con el cadáver semidesnudo y con signos de haber recibido varios golpes. Su rostro estaba morado por la asfixia.
Los sanitarios creyeron al principio que podría haber sido un suicidio, pero la autopsia en el Instituto de Medicina Legal detectó daños internos, por lo que había recibido una paliza. Uno de estos golpes provocó un infarto que acabó con su vida.
Además, los agentes determinaron que los autores realizaron el asalto siendo conscientes de que la víctima estaba en su casa. Querían saber la clave de la caja fuerte, pero ante la negativa del hombre de felicitarles la combinación, los asaltantes optaron por golpearle con cuchillos de cocina para llevarse la caja sin abrir.
Los agentes de la Policía Científica y del Grupo VI de Homicidios volvieron a la casa para continuar con las investigaciones. Todo apuntaba a un ajuste de cuentas. Los vecinos manifestaron que oyeron gritos de auxilio un día antes del hallazgo del cadáver.
La pista clave: una etiqueta naranja
Una de las claves del caso fue un par de guantes que se encontraron. En ellos se podía leer en mayúsculas "SÚPER BAZAR" y el precio de 1,80 euros. Habían sido comprados hace poco y su propietario dejó la etiqueta con el precio. Los investigadores solicitaron colaboración ciudadana para dar con el establecimiento que vendió los guantes.
Comenzaron entonces a inspeccionar establecimientos de la zona e incluso de otros distritos, pero las gestiones no tuvieron éxito hasta que días después los responsables de la investigación decidieron pedir la colaboración ciudadana a través de la cuenta de Twitter de la Policía.
"¿Sabes de qué comercio de la Comunidad de Madrid puede ser esta etiqueta?", preguntaban el 2 diciembre en su perfil. "Solicita a quien tenga información sobre ello que se comuniquen por correo a la dirección madrid.colabora@policia.es". Esa misma tarde, según ha confirmado la Policía en Twitter, los agentes encontraron el lugar, un establecimiento en el municipio madrileño de Parla, gracias a los mensajes recibidos por cientos de tuiteros.
Familiares directos de la víctima
Después de un año de investigaciones, se determinó la implicación de nueve personas en la muerte violenta, entre los que se encontraban dos familiares directos de la víctima. Seis de ellos como presuntos partícipes de un delito de homicidio, robo con violencia, detención ilegal y pertenencia a grupo criminal, mientras que los otros tres arrestados como presuntos responsables de los delitos de robo con fuerza y pertenencia a grupo criminal.