Ley del aborto
El punto que probablemente está generando más polémica es el hecho de que las menores de 16 y 17 años puedan interrumpir el embarazo sin consentimiento paterno. Estos son los argumentos a favor y en contra.
Hoy se ha aprobado la nueva ley del aborto y el punto que está generando más polémica es el hecho de que menores de 16 y 17 años puedan interrumpir el embarazo sin consentimiento paterno. Hay personas que están a favor de este cambio pero también los hay en contra. Hemos recopilado algunos de ellos.
Argumentos a favor del aborto
María (nombre ficticio) se quedó embarazada de imprevisto y abortó cuando tenía 18 años. Asegura que "ni quería, ni me veía preparada y menos con la persona que me pasó". Lo tuvo claro desde el principio. Se lo contó a su familia. "Me acompañaron, me ayudaron a buscar una clínica privada, lo pagaron".
Reconoce que su apoyo fue determinante. "Fue el peor momento de mi vida, estaba hundida, lloraba todos los días", nos cuenta. Ella acababa de cumplir la mayoría de edad pero ahora piensa, sobre todo, en las menores. "Si a una mujer se le considera adulta para ser madre, ¿por qué no puede abortar? Hay muchas chicas que no tienen ese apoyo, ni solvencia económica...", defiende.
Con esta ley no necesitan el consentimiento de los padres y además estará garantizado el aborto en los hospitales públicos. María argumenta que esto es positivo: "me parece un avance, no todos pueden permitirse una clínica privada".
Para Sonia Lamas, portavoz de ACAI (Asociación de Clínicas Acreditadas para la Interrupción del embarazo) y trabajadora de la Clínica Dator, el aborto es un derecho: "las mujeres ejercemos el derecho con 16, con 17 y a partir de 18 años". Considera positiva la nueva ley del aborto porque si los padres tienen convicciones o creencias religiosas que no lo permiten "así no dejamos a ninguna mujer de menos de 18 años en riesgo si a sus familias le comentan su decisión de abortar" y un avance social puesto que "es una manera de que las mujeres dejemos de estar tuteladas en el ejercicio de nuestros hechos".
Considera que es necesario formar a los profesionales sanitarios para que se puedan realizar en las instalaciones de la sanidad pública: " tiene que haber formación de los equipos profesionales en ambos métodos (farmacológico e instrumental) para que se pueda realizar con la misma calidad asistencial y sanitaria". Y asegura que "a fecha de hoy no hay esa formación en los currículos académicos".
Argumentos en contra del aborto
Irene Sánchez, pediatra jubilada y colaboradora de la Fundación Madrid, se muestra en contra: "Valorando mis años de profesión a mí me parece que no es una decisión adecuada. Yo creo que el consentimiento informado final con estas menores tienen que ser los padres. Considero que no todas las menores de 16 años está lo suficiente maduras como para tomar una decisión solas de esa envergadura".
Además, como médico, destaca los efectos negativos que puede tener en la salud física y mental de las menores como "mucho trastorno psicológico porque es una decisión muy dura. Mínimo ansiedad. Mucho estrés". Retirar el consentimiento paterno lo considera "un retroceso, es un retroceso" y también se muestra en contra de que se eliminen los tres días de reflexión antes de practicar el aborto.
Conrado Giménez, fundador y presidente de la Fundación Madrina opina que la nueva ley del aborto es un tema "simplemente ideológico, es político". "Las menores están desprotegidas", considera y apunta a que el aborto es un acto médico y que este cambio "perjudica la salud pública de las menores. Hay un desconocimiento absoluto de lo que es la maternidad en la infancia".
Argumenta los posibles riesgos que puede tener "están jugando con la vida, el compromiso y la psicología de estas menores".