Fertilidad
El método, enfocado tanto a la mujer como al hombre, ayuda a la búsqueda del embarazo a través de la enseñanza de los indicadores de la fertilidad.
Ante la imposibilidad de lograr un embarazo, muchas personas recurren a técnicas de reproducción asistida. Ante esta situación, la naprotecnología puede ser una alternativa. Se trata de "un abordaje de la infertilidad que, tras un estudio minucioso, permite detectar, diagnosticar y tratar las posibles alteraciones de la fertilidad, ayudando a la pareja a ser padres de una forma natural", explica la doctora Yolanda Fernández, ginecóloga de la Clínica Sagrada Familia de Barcelona.
Este es el tratamiento que ha comenzado Tamara Falcó. "Me lo comentó una amiga y es un método para medir tu cuerpo y asegurarte de que está bien", aclaraba en una entrevista a la revista '¡HOLA!'. "Es natural. No es un tratamiento de fertilidad como tal, pero te van estudiando tu cuerpo. Aunque es laborioso, es un proceso bonito", añadía.
Este método investiga y trata las causas subyacentes de la infertilidad, tanto en la mujer como en el hombre, para permitir la concepción en una relación sexual. Identifica el problema, coopera con los ciclos ováricos y de fertilidad, corrige la patología, mantiene la ecología humana y el potencial procreador. También proporciona tratamientos médicos y quirúrgicos que cooperan completamente con el sistema reproductivo.
Asimismo, según expone la doctora Fernández, ayuda a la búsqueda del embarazo a través de la enseñanza de los indicadores de fertilidad en mujeres y parejas con patologías más o menos complejas sin suplantar la relación sexual.
Patricia Alonso es ginecóloga de Fertilitas, la clínica elegida por Tamara Falcó e Íñigo Onieva. Es "la tónica general de nuestros pacientes cuando vienen con nosotros y se encuentran con el abordaje que hacemos. Como es muy distinto a lo que están acostumbrados y encuentran respuesta a problemas de salud ginecológica que hasta ahora quizá llegaban a considerar normales, la mayoría deciden compartir su experiencia en su entorno", declara ante la marquesa de Griñón de compartir su decisión.
Además, "es la única ciencia de la salud de la mujer que nos permite una monitorización reproductiva y un mantenimiento de la salud ginecológica que consiste en aplicar tratamientos médicos tanto hormonales como no hormonales o tratamientos quirúrgicos según el caso, de manera siempre cooperativa con el ciclo menstrual", añade la doctora Alonso.
El tratamiento no va dirigido exclusivamente a la mujer, también a la pareja. "Cuando el motivo de consulta es por fertilidad, se hace un abordaje integral de la pareja. Se hace un estudio exhaustivo por parte de ginecología a la mujer y por parte de urología, un estudio exhaustivo a todo lo que sea factor masculino", aclara la ginecóloga Patricia Alonso.
Otra de las características diferenciadoras de la naprotecnología es que no recurren a ella únicamente las parejas con problemas de fertilidad. "Inicialmente, cuando empezamos en España a trabajar con naprotecnología, la gran mayoría de parejas venían de un largo tiempo de infertilidad, pero hoy en día tenemos un público mucho más amplio. Es una medicina restaurativa de fertilidad y un abordaje integral para conocimiento del ciclo, monitorización del ciclo y muchas veces es incluso preventivo. Lo podemos aplicar a cualquier mujer en cualquier etapa de la vida", apunta la doctora Alonso.
La naprotecnología utiliza los biomarcadores del sistema Creighton Model FertilityCare para controlar de manera fácil y objetiva la ocurrencia de varios eventos hormonales durante el ciclo menstrual. Consiste en la observación y el registro gráfico estandarizado de marcadores biológicos que son esenciales para la salud y la fertilidad de la mujer.
El Modelo Creighton es un registro ginecológico que estudia el comportamiento diario del ciclo menstrual de la mujer. Incluyen el moco cervical, así como también la ausencia y presencia de varios tipos de sangrado, la longitud de las fases pre y post ovulatoria. Por este motivo, puede ser empleado como un método de seguimiento y mantenimiento de la salud ginecológica y reproductiva. Estas son sus aplicaciones:
1. La pareja puede identificar perfectamente los días fértiles e infértiles, del ciclo, lo que permite que la pareja hacer uso del sistema para lograr o evitar el embarazo.
2. Mantenimiento de la Salud Ginecológica y Reproductiva de la mujer. Los diferentes biomarcadores permiten detectar anormalidades en la salud ginecológica y reproductiva de una mujer durante toda su etapa reproductiva
3. Ante un caso de infertilidad/esterilidad, actúa como herramienta diagnóstica que guiará todo el proceso tanto diagnóstico como terapéutico de la naprotecnología.