España Solidaria
Gregorio sabía que le quedaban pocos meses de vida y estaba preocupado que podría ocurrir perro, Zeus. Hace un año decidió trasladar a su fiel compañero a un refugio para que no se quedara solo una vez ya no estuviese. Este refugio se movilizo para buscarle una nueva familia y apareció Irene.
Esta historia real, con final agridulce, ha inspirado el proyecto Eden, una iniciativa pionera de una protectora que se compromete a asumir el cuidado de perros en caso de fallecimiento de su dueño. Para ello debemos legarle en testamento la propiedad de nuestro perro.
Una idea más que útil en nuestro país, sobre todo teniendo en cuenta que hay más animales de compañía que menores de 15 años. Y entre todos los que eligen tener una mascota, 9 de cada 10 personas se decantan por los perros como los mejores compañeros.