Granada
Los hechos ocurrieron en Escóznar (Granada). La mujer abandonó la casa cuando los inquilinos llamaron a la Policía
Es de nacionalidad española, tiene 40 años, pelo rubio, complexión fuerte, alta de estatura y con el pelo recogido en una coleta. Así describe la Policía a la mujer que se coló en una casa de Ílora en Granada, tras fingir haber sufrido una avería en su coche.
Según Antonio Cobos, el jefe de la policía municipal de Íllora, "una mujer golpeó la ventana de la casa para pedir ayuda". Decía que necesitaba lavarse las manos y pedía permiso para entrar y así ir al baño.
Con lo que no contaba la mujer, es que el hombre no estaba solo y el baño casualmente estaba ocupado por la pareja del dueño de la casa, un tiempo que la mujer aprovechó para entretenerle y robarle la cartera sin que él se diera cuenta.
Antonio Cobos, jefe de la policía municipal de Íllora, cree que el propietario de la casa no se dio cuenta de la sustracción hasta que la mujer se fue y vio que su cartera no estaba en su sitio habitual.
Pidió dinero para marcharse de la casa
Lo que nadie esperaba es que cuando la intrusa sale finalmente del baño se niega a irse de la casa. Pidió a los propietarios que le dieran 50 euros si querían que se marche.
Ante la negativa de la pareja de entregarle dinero la intrusa les amenazó primero con romper una guitarra (instrumento que el propietario de la casa toca) y después con autolesionarse con un cuchillo.
Finalmente las voces y gritos alertaron a los vecinos que llamaron a la policía municipal de Íllora, pero cuando esta llegó la mujer ya había huido. Los agentes han lanzado una alerta de seguridad ante posibles hurtos y engaños sobre todo a los más mayores que suelen ser blanco de sus objetivos
La mujer se enfrenta a dos delitos, uno de coacción y otro de allanamiento de morada.