ESTABA DE VACACIONES EN BENIDORM
Krysten, escocesa de 27 años, subió a la décima planta, quería desayunar con sus amigas que se alojaban en diferentes habitaciones pero abrió la puerta equivocada. Dentro se encontró con los cinco turistas ingleses, tres de ellos continuaban la fiesta.
Celebraban un cumpleaños y en la mesa había cocaína, viagra y alcohol. La joven intentó huir, primero por la ventana del baño, después por la puerta de la habitación pero en su camino se habría cruzado Joseph Graham, principal acusado, con antecedentes penales por abusar sexualmente de una mujer en su país.
El relato de los 'cinco de Benidorm', como se conoce ya el caso en los tabloides ingleses, no convence a la Policía. Los testimonios se contradicen y el principal acusado llegó a decir en su declaración que la chica estaba loca, no paraba de gritar, estaba drogada y que por eso se habría suicidado.
En su desesperación, acorralada, Krysten intentó huir por el balcón. Pensaban que alcanzaría la piscina pero su cuerpo impactó contra el suelo. Los cinco están acusados de homicidio.