Metro de Madrid
Santos González, de 61 años y extrabajador del Metro de Madrid es la séptima víctima del amianto presente en el suburbano madrileño, tal y como ha comunicado el sindicato Comisiones Obreras ha fallecido como consecuencia de un cáncer provocado por la exposición al amianto durante el tiempo que trabajó en el metro.
Fue el primer trabajador del Metro al que se le reconoció la enfermedad profesional el 27 de abril de 2018 y compareció en la comisión de investigación sobre el amianto de la Asamblea de Madrid para explicar cómo manipuló y estuvo expuesto al amianto en los trabajos que realizaba en Metro de Madrid.
Santos González, junto a otros afectados y familiares, estaba personado como acusación particular, en el procedimiento abierto en el Juzgado de Instrucción número 23 de Madrid, que investiga a siete responsables de Metro de Madrid por presuntos delitos contra la seguridad y la salud de los trabajadores al permitirles desarrollar su trabajo expuestos al amianto sin protección.
El primer trabajador que falleció por asbestosis, cáncer por exposición al amianto, fue Antonio Morón en mayo de 2018, un oficial de mantenimiento jubilado. El amianto ha sido un material utilizado en todo el mundo entre los años 60 y 90. Según los afectados, desde finales de los años 90 la empresa del suburbano madrileño conocía la presencia de esta sustancia en su red pero en ningún momento llegó a informar de ello a los trabajadores. La toma de declaraciones a los responsables de ocultar esta información se ha llegado a suspender en tres ocasiones.
El periodo que transcurre entre la exposición y el desarrollo de la asbestosis suele ser entre 10 y 20 años. Por este motivo muchos de los trabajadores afectados por cáncer de amianto ya están jubilados.