Coronavirus
Tardan entre 300 y 400 años en degradarse, por lo que un gesto tan sencillo como cortar sus gomas puede salvar a los animales.
Con la pandemia del coronavirus, las mascarillas se han convertido en un accesorio más de nuestro día a día. En España, en interior y en exterior, cuando no se pueda guardar la distancia de seguridad, siguen siendo obligatorias.
Con la incidencia acumulada registrando una tendencia a la alta y la proximidad de eventos como la Navidad y Black Friday, donde se espera gran aglomeración de personas en las calles, los expertos insisten, la mascarilla debe mantenerse: "Nos debemos preparar, si la incidencia acumulada sigue subiendo tendremos que tomar acciones mucho más proactivas".
Cortar las gomas salva animales
Sin embargo, hay un aspecto de las mascarillas que se debe tener en cuenta: pueden llegar a tardar hasta 400 años en degradarse de forma natural.
De la misma forma, la goma también puede ser dañina para los animales. "Una mascarilla higiénica común abandonada en la naturaleza puede tardar en degradarse entre 300 y 400 años, varios cientos de años en los que nos afecta a nosotros, al agua, al suelo, flora y fauna. "En un momento en el que todos debemos actuar con responsabilidad, protegiéndonos y protegiendo a nuestros conciudadanos con el uso de mascarillas, es importante ampliar esa protección a los entornos naturales, que nos proveen servicios básicos como el aire limpio, agua y alimento, evitando abandonar mascarillas o cualquier otro residuo", apuntan desde el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
El pasado verano 'The Independent' publicó un vídeo en el que las patas de una gaviota habían quedado atrapadas entre las gomas de una mascarilla. En las imágenes se podía observar cómo dos veterinarios tenían que cortar las cintas.
Por esta razón, las organizaciones medioambientales piden cortar las gomas de las mascarillas quirúrgicas de un solo uso antes de tirarlas a la basura. Además, otra solución para acabar con el problema es utilizar mascarillas reutilizables para evitar producir más desechos innecesarios.