Esquelas
Un hombre de 80 años ha fallecido en Tenerife y su familia han querido recordarlo pidiendo una oración por su alma y haciendo referencia al apodo por el que le conocían.
Las esquelas, normalmente se usan para notificar la muerte de una persona, indicar el lugar, día y hora del entierro. Lo habitual es acompañar esta información con alguna frase cariñosa o emotiva, de los familiares y amigos que quieren despedir al ser querido. Con alguna expresión que permanezca en el recuerdo de todos, a modo de homenaje o como última voluntad.
Sin embargo, en ocasiones nos encontramos con esquelas sorprendentes o curiosas, con mensajes que, muchas veces, nos despiertan la carcajada. Eso es lo que estos días habrán sentido muchos lectores al visionar los periódicos tinerfeños.
Al abrir y pasar las páginas de los diarios locales nos hemos encontrado con la siguiente esquela: "Miguelito Verbena, el terror de las nenas".
Miguel Cervera Pérez falleció a los 80 años el pasado domingo 12 de mayo en el sur de Tenerife, concretamente en el municipio de Arona. Su esposa Mari Carmen y sus cuatro hijos han querido recordarlo de esta manera, pidiendo una oración por su alma y haciendo referencia al apodo por el que conocían a Miguel Cervera: Miguelito Verbena.
La familia de este octogenario asegura que a Miguel le gustaba que lo llamasen así, porque era una persona que disfrutaba de las cosas sencillas de la vida, a la que le apasionaba las reuniones familiares.
Miguelito Verbena siempre les decía que el día que se marchase de esta vida, quería que lo recordasen con alegría. Que hicieran una fiesta para tenerlo presente, más despedirlo entre llantos y lágrimas. Un deseo que su familia y seres queridos han querido plasmar de alguna manera en esta esquela.
A pesar del dolor por la pérdida de un esposo, padre y abuelo, todos están seguros de que don Miguel se encuentra alegrando y amenizando el lugar, allí donde esté, porque por eso es Miguelito Verbena, el terror de las nenas.
El pasado mes de marzo murió Laura Gippini, a los 47 años en Santiago. Hasta aquí una mala noticia, como cualquier muerte. Pero quienes han querido que se publique su esquela, lo han hecho tirando de mucho humor.
"Tu familia y todos tus amigos te recordaremos y te querremos siempre por tu alegría y por la que has 'liao' el día de tu cumpleaños". Desconocemos cómo fue esa fiesta pero, seguro, digna de recuerdo. Y ya inmortalizada para la eternidad en este diario.
El texto no queda ahí. Antes de rogar una oración por su alma también se puede leer: "Menos dramones y más bombones". Así que, pese a la celebración de su entierro, el humor debe imperar en esta despedida, redactada con tanta gracia.
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