CÁDIZ | SEGÚN 'LA VOZ DEL SUR'
Mari Ángeles García y Patricia Cecilia Román trabajaban en el supermercado Mercadona de la avenida Puerta del Sur de Jérez (Cádiz) hasta el pasado 6 de junio. Ambas fueron despedidas después de comerse un snack en horario laboral. En concreto ambas ingirieron un 'saladito' de apenas 15 céntimos que estaba a punto de caducar.
El incidente tuvo lugar cuando ambas estaban a punto de terminar una larga jornada laboral. Las trabajadoras se encontraban exhaustas y una trabajadora de la panadería les ofreció dos saladitos que estaban a punto de caducar, tal y como aseguran las afectadas al diario 'La Voz del Sur'.
La encargada les reprochó su actitud y las sometió a un acoso laboral que finalizó con el despido. Las mujeres, ambas madres solteras, reclaman una indemnización.
Para Mercadona está práctica es una falta grave recogida en el artículo 34 de su convenio colectivo, que contempla “el robo, hurto o malversación cometidos (…), sea cual fuere el importe” por la “apropiación indebida de productos destinados a la basura o promoción”.