DECLARA KEVIN EN EL JUICIO POR SU RAPTO
Kevin no ha podido contener las lágrimas durante el juicio por su secuestro en septiembre de 2012. Durante la sesión, su madre le ha abrazado para consolarlo.
El pequeño, que tenía 11 años cuando sufrió el secuestro, permaneció tres días raptado, ha explicado que lo amenazaron de muerte: "¿Te dijeron que te cortarían la lengua si no te portabas bien?", le ha preguntado la juez, a lo que el menor ha respondido llorando "sí".
Kevin fue retenido en un piso. La policía le encontró a oscuras, sedado y atado de pies y manos. Además, durante su cautiverio, le inyectaron ansiolíticos y le suministraron sedantes. Este lunes, el menor lo ha explicado ante la juez: "Me pinchó con una jeringuilla. Tenía dentro un líquido..."
La madre del menor, Ana María, ha relatado que en septiembre de 2009 se dirigía a una gasolinera cuando varios hombres armados les apuntaron con una pistola y raptaron al pequeño. Le pidieron un rescate de cinco millones de euros.
"Me dijeron que no fuera a la policía, que no denunciara... que si a Fernando le pasaba algo en la prisión, al chiquillo lo mataban", ha declarado la madre, que finalmente pudo reencontrarse con su pequeño.
Fernando es el supuesto cerebrero de la trama. Lo planificó todo desde una cárcel de Valencia, donde conoció al padre del niño, que este, a su vez, ha asegurado en el juicio que no tenía ninguna deuda con el acusado.