VERANO SOFOCANTE

El calor se instala en la península y las altas temperaturas llegan a media España

El calor vuelve a recorrer España a mediados de agosto y pone en alerta 30 provincias por altas temperaturas. En lugares como el centro de Andalucía o Castilla-La Mancha los termómetros rozarán los 40 grados.

Un total de 30 provincias españolas estarán este martes en alerta amarilla por altas temperaturas e incluso en Gran Canaria se registrará un aviso de riesgo importante, según la Agencia Estatal de Meteorología.

Treinta provincias de Andalucía, Aragón, Canarias, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Madrid, Extremadura, Galicia y Murcia en alerta por altas temperaturas, que en algunas zonas, como Toledo, pueden rondar los 40 grados.

La alerta roja está activada en La Mancha toledana, Montes, y valle del Tajo (39 grados) y en zonas de Gran Canarias por temperaturas que pueden llegar a los 37 grados.

Este tipo de alerta significa que es un fenómeno meteorológico no habitual y que hay cierto grado de peligro para las actividades usuales. Por otra parte, la alerta amarilla está activada en Córdoba, Huelva y Sevilla con temperaturas que pueden alcanzar los 39 grados y en zonas de Almería, Cádiz, Granada, Jaén, Málaga, Ciudad Real, Cuenca, Cáceres y Badajoz, Ourense, con 38 grados.

La Aemet prevé que en la Alcarria (Guadalajara), y en zonas de Madrid y Murcia, los termómetros alcancen los 37 grados En el sur de Huesca, Teruel, en zonas de Zaragoza, Albacete, sur de Ávila, meseta y sur de Salamanca, litoral sur de Tarragona, el termómetro subirá hasta los 36 grados. Ya con 34 grados están en alerta en el Pirineo y en el valle de Arán (Lleida).

Ante el calor extremo, Protección Civil aconseja adoptar las oportunas medidas de protección, como limitar la exposición al sol, mantenerse en lugares bien ventilados, ingerir comidas ligeras y regulares, ricas en agua y sales minerales, beber mucha agua o líquidos, y evitar ejercicios físicos prolongados en las horas centrales del día. Aconseja, además, interesarse por las personas mayores y enfermas próximas, que vivan solas o aisladas.

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