Teletrabajo
Las empresas y sus empleados se han tenido que adaptar también a los efectos de la pandemia. Un año después de su estallido, el teletrabajo se ha casi duplicado en toda España, y ya son muchos los trabajadores que prefieren compaginarlo en un futuro con la presencialidad, de vez en cuando, en las oficinas.
El trabajo desde casa fue una de las primeras precauciones que se tomaron para frenar los contagios, cuando todavía solo eran unos pocos en España. La reducción de la interacción social, también en las oficinas, parecía la mejor opción. Ahora, un año después, los españoles hacen balance sobre el teletrabajo, destacando tanto sus cosas buenas, como su otra cara.
Los beneficios del teletrabajo
Una de las ventajas que algunos españoles destacan del teletrabajo es la reducción del tiempo de las reuniones a prácticamente la mitad y el aumento de la productividad. "Ahora es todo más inmediato y durante el día tienes más tiempo para hablar con más clientes", cuenta X.
También destacan la facilidad de conciliar lo personal con lo profesional, especialmente los empleados que trabajan lejos de sus casas. A x, el teletrabajo le ha permitido "estar con mi familia y trabajar en una empresa que está a 400 kilómetros de mi casa".
Incluso algunos empresarios han sacado algo bueno de esa distancia, como captar otras mentes con las que no comparten municipio, provincia, ciudad o país. "Nos ha permitido contratar talento que no estaba en Barcelona, sino en otros puntos de España". XXX
Las desventajas del teletrabajo
Sin embargo, para algunos el teletrabajo se les puede hacer más cuesta arriba. Uno de los principales problemas de trabajar desde casa es la dificultad de desconectar, saber acotar horarios e incluso aprender a ser productivo sin gente a tu alrededor.
"Mi área de trabajo es la mesa donde yo desayuno, como y ceno cada día", cuenta.
"Estamos fuera del entorno laboral y no compartimos tiempo ni espacio. Eso no es bueno", destaca también X
Los efectos del coronavirus nos han obligado a adaptarnos a muchas nuevas nuevas situaciones, a la que se suma la capacidad de teletrabajar y despedirnos de ir a la oficina. Está por ver qué ocurrirá con esta modalidad laboral una vez logremos combatir la pandemia.