España despoblada
Los habitantes de estas aldeas viven en la tranquilidad del rural
La capital de Galicia cuenta con 100.000 habitantes. Una cifra redonda que en más de 60 aldeas de su extrarradio se divide por ese mismo número. Sí, pueblos que cuentan con tan solo un habitante. En algunos, los vecinos no contabilizan ya ninguna persona. En otros, aguantan ese único residente en el lugar que lo ha visto nacer y crecer.
Subidos al coche llegamos hasta A Gordela, una aldea en el municipio coruñés de Touro, donde solo vive una persona. Timbramos en su casa. Aunque sí que vive gente, no contesta nadie, pues tiene perro, caballos y un tractor. Nos volvemos a subir al vehículo hasta Bar. "Bar son aquellas dos casas de allí. No vive nadie", nos señala Manuel, vecino de Remesil. "Aquí somos tres, y cuando nos vayamos… nadie, no quedará nada", se lamenta, siendo consciente de la despoblación que vive el rural gallego.
"Vivo yo solo en A Porfía, murió mi marido y me quedé sola". Son las palabras de Dulce, la única habitante de la aldea de A Porfía, en la parroquia de Rendal. Su amabilidad se traduce en su manera de recibirnos, con una bandeja en la mano llena de orejas, uno de los platos típicos del carnaval gallego. "Esto es más tranquilo que la capital, hasta a los niños les encanta, vienen y juegan con los animales", dice orgullosa esta solitaria vecina.
Por supuesto, no se le pasa por la cabeza marcharse: "esta es la casa de mis padres, donde nací, vivo aquí". Y la gran pregunta es qué pasará cuando ella falte: "¡que quedará A Porfía sola!", afirma entre risas. Complicado dejar el lugar que te ha visto crecer.