Coronavirus
Según los expertos, controlar la calidad del aire y medir el CO2 es lo más importante para prevenir otra ola de contagios
El 20 de abril ya va a pasar a la historia como el día en el que se eliminó el elemento más simbólico de la pandemia: la mascarilla. Un día que muchos han acogido con felicidad y ganas, otros con temor y prudencia.
La situación favorable de la crisis en España, tal como afirma la Ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha sido el punto de inflexión para tomar esta decisión. La mascarilla ha sido la principal medida de protección frente al covid durante estos dos años. Ahora que nos hemos deshecho de ella, ¿cómo podremos evitar el contagio?
Según los expertos consultados por Antena 3 Noticias, la clave está en la ventilación. “Quitar las mascarillas no quiere decir en absoluto que haya bajado la posibilidad de contagiarse”, asegura Margarita del Val, viróloga e investigadora del CSIC.
Medir y controlar el CO2, clave
Al dejar atrás las mascarillas, cobra especial valor el aire que respiramos. "Quitamos una cosa y tenemos que poner otra", asegura la inmunóloga. De acuerdo con ella, un alto nivel de CO2 en el ambiente significa que estamos inhalando aire de otras personas, por lo que la transmisión del virus es muy sencilla. Por ello, en esta nueva fase de la pandemia, medir y controlar el CO2 resulta una medida indispensable para cortar los contagios.
José Luis Jiménez, ingeniero industrial y primera persona en advertir a la OMS que la covid se contagia por aerosoles, ha mostrado cómo funcionan los aparatos de medición del CO2: "Si estás en un sitio como este que es prácticamente al aire libre, puedes quitarte la mascarilla de forma segura, pero si está muy alta te la tienes que poner o ventilar".
La sexta ola no será la última
Este sistema para controlar la calidad del aire no solo previene del covid también de cualquier otro agente infeccioso "como la gripe, la varicela o el sarampión, lo que es muy útil para evitar futuras pandemias", continua Del Val.
La investigadora cree que esta es la mejor arma para convivir con el virus, porque la sexta ola no será la última. "En invierno vendrá otra ola y por eso debemos estar preparados con medidas como el control del aire", concluye.