Maniobra de Heimlich
El atragantamiento se produce cuando una persona no puede hablar, toser o respirar. La maniobra de Heimlich puede salvar la vida por atragantamiento de forma sencilla si se tienen los conocimientos adecuados para hacer frente a una situación de este tipo.
La guía para salvar vidas
El dato es sobrecogedor, más de 2.000 personas fallecen cada año en España por atragantamiento. Las personas que sufren este accidente se asfixian con un objeto o un trozo de comida. La mayoría de los casos tienen alguien cerca que no sabe cómo evitar que se atraganten.
La maniobra de Heimlich es una secuencia de compresiones abdominales bajo el diafragma y se pone en práctica cuando hay alguien que se está atragantando por un bloqueo de las vías respiratorias.
La persona no puede hablar, toser o respirar, tiene las vías respiratorias obstruidas y puede sufrir pérdida de consciencia y la muerte. Hay que tener en cuenta para aplicar la maniobra de Heimlich que debe realizarse midiendo la fuerza para no dañar las costillas o los órganos internos de la persona.
En los adultos, la maniobra de Heimlich abre una línea de respiración, obligando al aire a salir de los pulmones para crear tos artificial. Esa tos empujará y expulsará al exterior el objeto o trozo de comida que obstruye las vías respiratorias.
Para efectuar la maniobra de Heimlich, rodee con sus manos la cintura de la persona que presenta el atragantamiento. Coloque un puño apretado por encima del ombligo y debajo de la caja torácica. Sujete su puño con la otra mano.
Tire del puño con un movimiento seco hacia atrás y hacia arriba bajo la caja torácica de seis a 10 veces. Los expertos recomienda repetir esta acción rápidamente. En caso de sobrepeso o estado de gestación en la última etapa, hay que realizar compresiones en el pecho para abrir la vía respiratoria. Hay que efectuar de forma continuada esta acción hasta que se logre expulsar el objeto o trozo de comida.