Volcán La Palma
La ceniza del volcán de La Palma ha empeorado la calidad del aire en las localidades más próximas. Los niveles de dióxido de azufre, aunque más bajos que otros días, siguen siendo muy elevados.
Las condiciones en la isla de La Palma han empeorado en las últimas horas como consecuencia de la erupción que comenzó el pasado 19 de septiembre. Uno de los efectos que está teniendo es el empeoramiento de la calidad del aire, a la que han calificado como demasiado “desfavorable”.
Este hecho ha provocado que los colegios en cinco municipios de la isla, El Paso, Tijarafe, Los Llanos de Aridane, Tazacorte y Puntagorda, hayan tenido que cancelar sus clases presenciales. De esta manera, los alumnos están atendiendo a las clases online, por tercera vez desde que comenzó la erupción del volcán de La Palma.
Además, la mala calidad del aire, como consecuencia de la erupción del volcán de La Palma, ha provocado que se hayan tenido que cancelar varios vuelos en el aeropuerto de la isla. En un principio, Binter, la compañía aérea, se ha visto obligada a cancelar cuatro vuelos, dos de ida y dos de vuelta. Sin embargo, hace unas horas, ha anunciado que retoma su actividad con La Palma.
Se forma una nueva fajana por el volcán de La Palma
La lava que expulsa el volcán de La Palma ha llegado por cuarta vez al mar, por lo que se podría generar una nueva fajana. Ayer, 15 de noviembre, llegaba por tercera vez. Lo hacía sobre la fajana que se formó durante la erupción de San Juan, que ocurrió en 1949, según explicaba Vicente Soler, vulcanólogo del Centro Superior de Investigaciones Científicas.
Por otro lado, la lava del volcán de La Palma sigue cayendo con gran intensidad sobre lo que antes era la playa de Los Guirres. “El mar ha hecho su acción" cerrando parte de la entrada de dicha playa y creando una especie de piscina central de agua caliente, por lo que se ha formado una especie de piscina térmica.
El volcán de La Palma destroza 1.042 hectáreas
La lava del volcán de La Palma ha destrozado hasta el momento un total de 1.042 hectáreas. Además, ha destruido o afectado 2.623 edificaciones, según ha indicado el sistema europeo de satélites Copernicus. Estas cifras llegan después más de un mes de erupción, que comenzó el pasado 19 de septiembre.