Montcada i Reixac
La madre de la menor atropellada en Montcada por un tren cuando cruzaba un paso a nivel ha pedido justicia para su hija y que se tomen medidas contra Adif.
Una menor de 16 años murió este lunes por la tarde arrollada en un paso a nivel de Montcada i Reixac, Barcelona, que tenía las barreras bajadas. La maquinista dio positivo en un test de drogas que se le practicó por la Policía Local en el lugar de los hechos. Sin embargo, dio negativo en drogas en las pruebas de contraste realizadas por los servicios médicos de Renfe.
La primera de estas pruebas, concreta el Sindicato Español de Maquinistas Ferroviarios (Semaf), se hizo al poco tiempo del realizado por la Policía Local de Montcada i Reixac, y el segundo, dos horas después para asegurar un primer contraste.
El sindicato ha incidido en todo momento que los test rápidos acostumbran a dar falsos positivos al no tener tanta fiabilidad como el análisis de sangre u orina, ya que son unas pruebas "muy primarias que se utilizan para realizar un descarte rápido", y que en caso de positivo requieren luego de una prueba de contraste, que mide la muestra biológica con mayor precisión.
'Y Ahora Sonsoles' ha hablado esta semana con Olga, madre de la víctima. La mujer ha explicado que tuvo que ir a las vías del tren y encontró restos biológicos de su hija. "Fui a las vías del tren y vi como Adif había dejado restos biológicos de mi hija. Los tengo yo en la nevera guardados", señalaba la mujer.
En este sentido, Olga ha pedido justicia para su hija y que se tomen medidas contra Adif por, presuntamente, dejar los restos de su hija allí. "Tengo huesos de mi hija en casa, esto no se puede consentir", ha aseverado.
El alcalde de Montcada i Reixac, Bartolomé Egea, ha señalado que el paso a nivel donde ha ocurrido el accidente se soterrará gracias a las obras que comenzaron hace un año, pero mientras duran estas el Ayuntamiento pide más seguridad a los responsables de Renfe y de Adif, a los que reclama vigilantes en las horas punta.
El paso a nivel de Moncada y Reixach, situado en el área metropolitana de Barcelona, ha sido considerado peligroso durante mucho tiempo debido a diversos factores. Concretamente, han fallecido 182 las personas por esta causa en la localidad durante 40 años.
En primer lugar, se trata de una línea ferroviaria muy transitada, con una alta frecuencia de trenes que circulan diariamente. Esta situación incrementa el riesgo de accidentes tanto para los peatones como para los vehículos que cruzan por el paso.
Aunque cuenta con medidas de seguridad como barreras automáticas y señalización, muchos consideran que estas no han sido suficientes para prevenir los incidentes. La visibilidad reducida en ciertos momentos y la confusión que a veces se genera entre peatones y conductores han contribuido a que siga siendo un punto conflictivo.
Otro aspecto relevante es su ubicación en una zona urbana, lo que aumenta la interacción entre el tráfico rodado, peatones y los trenes, particularmente en horas de mayor afluencia. Esta situación añade un factor de riesgo adicional a un entorno que ya es de por sí complicado.
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