Okupas
Los vecinos de un barrio de Girona denuncian que viven una situación insostenible. En un mismo bloque, conviven con okupas y un narcopiso.
Los vecinos de este bloque piden soluciones inmediatas y quieren recuperar la vida que dicen que tenían antes en el barrio. Ahora aseguran que se sienten abandonados porque llevan mucho tiempo conviviendo con un narcopiso y dos viviendas llenas de okupas.
Además, aseguran que a diario se cruzan decenas de compradores en las escaleras del edificio y que el olor a droga en el edificio es insoportable: "No se puede vivir así, hay mucho olor a 'maría'", explica una vecina. "Da respeto por que dices 'qué me va a hacer'", afirma otro vecino de este bloque.
Incluso han tapiado la puerta de unas de las viviendas vacías para evitar que se alojen okupas en su interior, en la que ya habían entrado en más de una ocasión: "Hemos cortado las cabezas de los tornillos con una radial", explica.
Los vecinos confiesan que tienen miedo y que no se sienten seguros. Además, apuntan que el problema no se erradica sino que se traslada a otras calles del barrio.