GOTA FRÍA
La DANA golpeó con mucha fuerza Los Alcázares, a orillas del Mar Menor. Aunque el agua empieza a retirarse, las calles están ahora repletas de inmuebles y objetos personales echados a perder. Quedan por delante muchos días de limpieza, el municipio se ha convertido en un mar de barro.
Viviendas y comercios han quedado destrozados, sus dueños dan casi todos los productos por perdidos. Los vecinos no dan a basto y no paran de sacar cubos de barro y agua. Una situación que los vecinos califican de "desesperante" porque es muy complicado entrar en las viviendas y ver todo lo que han perdido.
Allí están también decenas de militares del Ejército de Tierra apartando el lodo como pueden y trabajando junto a los vecinos para restablecer cuanto antes la normalidad a la localidad.