Desperdicio de comida
El Parlament catalán aprueba una ley por la que los restaurantes catalanes estarán obligados a ofrecer un táper al cliente que no haya acabado su comida. La norma pretende acabar con el despilfarro de alimentos.
Los restaurantes estarán obligados también a aceptar las fiambreras que lleven los clientes de sus casas. Además el táper que ofrezcan los restauradores tendrán que ser biodegradables y no conllevarán coste alguno.
El director del gremio de restauración de Barcelona, Roger Paggarols, explica que "se trata de regular algo que ya se hace, que ya está arraigado" para evitar el desperdicio de comida. Se calcula que en Cataluña se tiran cada año 35 kilos de alimentos por persona.
Además los grandes supermercados tendrán que poner más baratos los productos que vayan a caducar pronto para que no haya que tirarlos.