LAS PLAZAS SE QUEDAN SIN CUBRIR
Las cárceles españolas se quedan sin médicos. Salen pocas plazas y las que salen no se cubren fácilmente. La razón principal es que ganan bastante menos que los médicos de atención primaria que trabajan en centros de salud. En cuestión de salario, la diferencia entre ser médico de atención primaria en la cárcel o en un centro de salud normal son 1460 euros brutos al mes.
Además, las patologías que tratan en el día a día distan mucho de las que pueden tratar otro médicos de familia. Algunos de sus pacientes tienen problemas mentales o de drogas, lo que les expone más. También son frecuentes pacientes con VIH, hepatitis vírica o brotes psicóticos.
Piden depender del Ministerio de Sanidad en vez de de Interior y que se aplique la ley de 2003 que trnsfiere estas competencias a las comunidades. Esto solo sucede en País Vasco y Cataluña, donde sí se cubren plazas porque cobran un plus.