Hostelería
Una cafetería de Vigo reduce sus horarios para ganar en calidad de vida y ahorrar costes
Tener un local de hostelería y cerrar a las 18.00 de la tarde ya es posible. Es la hora a la que baja la verja una cafetería de Vigo. Las principales razones: mejorar la calidad de vida de los trabajadores, ahorrar en los costes de energía y no volverse loca buscando empleados. Una medida que no gusta a todos, pero que ha llegado para quedarse.
Son las 18.00 de la tarde y Jessy le pregunta a su jefa "si voy limpiando ya la cafetera". Mar mira el reloj y le hace un gesto con el dedo "no no, aguanta que es fin de semana". La equivocación es por el nuevo horario que tiene la cafetería 'Coffe Runners' desde hace un mes: "por la semana cerramos a las 18.00, el fin de semana hasta las 21.00", afirma Mar Guevara, responsable de esta cafetería.
"Si a ellas les parece bien, a mí genial", dice una clienta que para todos los días a tomar el café con su marido en este establecimiento. También está de acuerdo con la medida otro cliente, aunque a él le "extrañó al principio, pero no me repercute en nada, vengo a desayunar y muy rico todo". Aún así, Mar admite que tienen opiniones de todo tipo: "están los que dicen 'qué hacéis, no tenéis el fútbol'".
Para sus trabajadores, en cambio, lo que comenzó como una "prueba" es ya una gran decisión de su jefa. Unai, camarero, nos reconoce que en otros trabajos "hacía horas de más, pero aquí estoy perfecto". Es la tendencia a la que se tendrán que adaptar los clientes, donde prima la eficiencia y la conciliación, porque como dice la propia Mar "nos hemos dado cuenta de que hay que vivir y no solo trabajar".