EN MADRID
Dar "un hogar fuera de su hogar" es el objetivo que tienen unas residencias en Madrid destinadas a niños que, junto a sus familiares, se trasladan lejos de su domicilio para recibir tratamiento médico de larga duración.
El alojamiento es gratuito y en ellas cuentan con todo tipo de servicios, como espacios para el ocio o habitaciones personales. Se trata de una segunda casa en la que conviven niños que tienen que trasladarse a Madrid para recibir un tratamiento médico de larga duración.
"Tratamos que, como se tienen que desplazar durante bastante tiempo, consideren que esta casa es un hogar fuera de su hogar y mantener a las familias cerca en momentos muy complicados de su vida", explica José Antonio García, el director de la fundación infantil Ronald McDonald. "Cuando ya han acabado el tratamiento, hay niños que nos dicen que les gustaría seguir aquí, pero ellos tienen que seguir su vida, con sus amigos y sus familias", añade.