Coronavirus y economía
Tras mes y medio sin 'pulpeiros' en las calles de la provincia de Ourense, en Galicia, el sector pide que se les autorice a volver a su actividad.
“Un puesto en la calle no es un problema, la licencia la tenemos pagada y aunque se han suspendido las ferias y eventos, podemos trabajar como una frutería”, explica la presidenta de la Asociación de Pulpeiros.
El parón en la actividad empresarial les obligo a cerrar a principios de marzo, como consecuencia del estado de alarma por coronavirus. No pueden estar más tiempo sin ingresos, aseguran, y no ven problema en reactivarse por cómo despachan el pulpo.
“En los puestos no se aglomera la gente, se ponen en fila y cada uno coge cuando le toca. No tocan las bolsas porque somos nosotros quienes les damos el producto”, argumenta María Isaura González, pulpeira en Carballiño.