SOMETIDO A JUICIO
Antonio José T.R. declaró este martes como investigado por un presunto delito de acoso sexual sobre una subordinada, extremo que ha negado, pero que los testigos han ratificado.
El jefe de la Policía Autonómica en Vigo, Antonio José T.R., ha declarado este martes como investigado por un presunto delito de acoso sexual sobre una subordinada, extremo que ha negado, informaron fuentes jurídicas. Hace dos meses ya pasó por el mismo juzgado la agente que denuncia el supuesto acoso y días atrás hicieron lo propio cuatro compañeros, que ratificaron la versión de la víctima.
Él lo niega absolutamente todo, pero sus compañeros, pero cada una de las cosas que figuran en la denuncia van acompañadas del testimonio jurado de otro agente del mismo cuerpo. Entre otras cosas, el acusado decía lo siguiente: "Pero qué morenita estás, seguro que ese moreno es de solárium. ¿Es morenito integral? ¿Tú a qué playa vas? Yo voy a la playa nudista de Barra con mis hermanas. A ti el uniforme no te queda como a los demás, seguro que lo llevaste a la modista para que entallarlo".
Estas expresiones se dieron, presuntamente, en horario laboral y algunas, incluso, en briefings preparando operativos y en presencia de otros compañeros.
Algunos de los testigos que lo corroboran señalan algunas otras frases: "¿Tú cuántos novios tienes? Porque claro, tú eres una chica muy liberal. ¿Por qué no te compras un chalet? ¿Quieres un inspector de 3.000 euros al mes que te ayude a pagarlo?". Son frases que la denunciante no señala en su denuncia, sino que son los testigos los que las han referido.
Con el tiempo, según la denunciante, ese acoso sexual tornó en acoso laboral, y él llego a decirle: "Ha llegado a oídos de los Jefes de Santiago que yo ando detrás de ti y que como de tu mano, y esto no puede ser ya que me puedo meter en un problema". Según los testigos iba más allá: "Si ella ha tenido una discusión con un compañero, bien seguro que quien tenía la razón es él y no ella, y que si el compañero le había gritado ordenándole salir del coche para conducir él, sería porque ella iba dando tumbos; y que eso bien hecho estaba; y que además era la palabra de él contra la de ella, y que por lo tanto sería ella quien tendría que demostrar que ese compañero le había gritado sin motivo".
También tenía palabras contra ella: "Algo le harás a tus compañeros cuando vas de copiloto, que le pisan mucho al acelerador. Y ya es la segunda vez que se saltan un radar cuando tú vas de acompañante".