Denunciada por la madre
El pasado 20 de diciembre una profesora se dispuso a ponerle a un niño un babi para que pudiera comer en el comedor. Era la tercera vez durante este mes que el menor olvidaba la bata del comedor, por lo que la profesora, según cuenta su abogado, creyó oportuno ponerle uno de repuesto para que no se manchara. Aquí surge la polémica.
"La profesora dice que el color era verde y no rosa, y que el crío se sintió fatal", asegura el abogado de la profesora.
El niño se lo contó a sus padres, que tras hablar con el colegio decidieron poner una denuncia contra la profesora, que podría haber cometido un delito por "trato degradante".
En el centro educativo no obligan a llevar determinados colores en el baby. De hecho, los hay rosa, azul, verde o violeta y cada uno elige el tono libremente. Según el abogado de la profesora, su cliente se encuentra sobrepasada por lo ocurrido.