ESPECIALMENTE AFECTADAS EN Extremadura
Los paisajes de encina en Extremadura se secan. El hongo ataca directamente a la raíz de encinas y alcornoque. Una vez infecta a las plantas, estas pueden tardar hasta dos o tres años en secarse. Primero empieza a cambiar su tonalidad y después se marchitan poco a poco hasta morir.
Los periodos de sequía y el cambio climático empeoran la situación. El hongo aprovecha la debilidad de los árboles para extenderse más rápido. La Diputación de Cáceres puso en marcha a principio de año, una investigación para encontrar una solución a la amenaza del hongo. Investigadores han visto que existe un tipo de encina que no se ve afectada por la plaga: la seca. Es por ello que intentan clonarla.
La muerte de las encinas repercute directamente en el cerdo ibérico, ya que sin bellotas, los animales no pueden alimentarse. Los ganaderos apuntan que, en consecuencia, la producción de jamón ibérico se vea afectada.