ESPECIALMENTE EN LAS ISLAS BALEARES
El objetivo es evitar incidentes en este tipo de eventos en los que, muchas veces, la diversión y el exceso van de la mano.
Los barcos navegan llenos de gente con ganas de baile, fiesta y casi siempre alcohol. Son las fiestas en barco, más conocidas por su nombre en inglés, 'boat party', y que cada vez más solicitadas en España, ofreciendo una oferta que se multiplica. Los organizadores compiten en su oferta de más horas de diversión y alcohol a menor precio.
Veinte de estas embarcaciones ya saben lo que es parar la música por una visita inesperada. La policía inspecciona los permisos, el aforo, el estado de chalecos y bengalas. Además, se controla que capitán y tripulación estén en condiciones, y se persigue el consumo y tenencia de drogas a bordo.
Estos controles tratan de evitar tragedias como la de hace dos años, en Ibiza, cuando un joven polaco murió ahogado tras consumir alcohol y drogas que había comprado en el mismo barco. La Guardia civil encontró su cuerpo en el fondo del mar.
Ahora se quiere actuar antes para garantizar que estas fiestas sean seguras. Además, se controla el volumen de la música. Si todo está en orden, puede seguir la fiesta.