En Perdiguera y Leciñena
El incendio declarado entre los términos de Perdiguera y Leciñena (Zaragoza) en las proximidades de la sierra de Alcubierre está estabilizado aunque el control del fuego, que ya ha arrasado 1.200 hectáreas, dependerá de las condiciones climáticas, ya que se espera un aumento de las temperaturas y del viento.
El fuego se declaró en la partida de La Pinada por la avería y posterior incendio de un 'buggie' y la rapidez con que se propagó obligó al Centro de Coordinación Operativa del Gobierno de Aragón a solicitar la intervención de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
En la actualidad, los medios aéreos se centran en el flanco derecho, donde se encuentra la zona de mayor peligro, ya que continúa humeando y las condiciones climáticas no son favorables, y desde el Gobierno de Aragón informan de que "las próximas horas serán decisivas para dar por controlado el incendio".
El director general de Gestión Forestal, Ángel Berzosa, ha atendido a los medios de comunicación este martes en el Puesto de Mando Avanzado (PMA), instalado en la cooperativa de Leciñena, desde donde ha informado de que se han quemado 1.200 hectáreas: 160 arboladas, 700 de monte bajo y matorral y terreno agrícola el resto. Según Berzosa, el flanco izquierdo se encuentra completamente estabilizado pero el derecho, punto de inicio del incendio, "puede dar algo más de problema", ya que afecta a más masa forestal y es donde se están concentrando "todos los medios aéreos para intentar enfriar la zona cuanto antes".
El operativo está compuesto por alrededor de 150 efectivos repartidos en cuatro cuadrillas helitransportadas, cinco terrestres, cinco autobombas y una nodriza, un bulldozer, un avión y un helicóptero de coordinación.
El Puesto de Mando Avanzado está instalado en la cooperativa de Leciñena, donde hay un director de extinción, dos técnicos y un grupo de Apoyo al Director de Extinción (Gadex), formado por otras tres personas. El operativo cuenta también con dos aviones anfibio del Ministerio para la Transición Ecológica y un Kamov, otro helicóptero de carga y con gran capacidad.
Además, participan diez Agentes de Protección de la Naturaleza (APN), miembros de la Guardia Civil, la UME (con 40 efectivos, 6 autobombas, una nodriza y un bulldozer); la Diputación de Zaragoza, con una nodriza, la Cruz Roja y agricultores de la zona que desde ayer se han volcado con sus herramientas de trabajo en las labores de extinción. Berzosa ha recordado que prácticamente todo Aragón presenta este miércoles y mañana un máximo nivel de alerta por riesgo de incendios forestales.