ACUSADOS DE UN DELITO CONTRA LA SEGURIDAD COLECTIVA
Se trata del director y el jefe de servicio de protección radiológica de la planta. Ninguno de los dos ha querido prestar declaración, a la espera de conocer las pruebas periciales. El accidente se produjo en noviembre de 2007 y fue clasificado con un nivel 2 de una escala de 7. Los responsables no informaron de ello hasta cinco meses después. Mil seiscientas personas, la mayoría trabajadores, se sometieron a las pruebas de radiación. También niños de varias escuelas que habían visitado la central. El incidente les costó la multa más alta en la historia de las nucleares de nuestro país: más de 15 millones de euros.