Caso Diana Quer
El jurado popular ha declarado a Enrique Abuín, alias 'El Chicle', culpable de un delito de agresión sexual y del asesinato con alevosía de Diana Quer, cuya desaparición fue denunciada el 22 de agosto de 2016 durante las fiestas de A Pobra y cuyo cadáver fue localizado, casi 500 días después, en el interior de un pozo ubicado en una nave abandonada de Asados, en Rianxo.
Así lo han decidido de forma unánime los miembros del jurado tras una deliberación que se ha prolongado durante cuatro días, desde que les fuese entregado el objeto de veredicto en el mediodía del martes.
En particular, consideran probado durante las 11 sesiones del juicio que 'El Chicle' asesinó a Diana Quer tras agredirla sexualmente, pero no violarla, en la nave de Asados, lo que abriría la puerta a que fuese condenado a la prisión permanente revisable.
500 días desaparecida
La pista de Diana Quer se perdió en las fiestas de A Pobra do Caramiñal el 22 de agosto de 2016, mientras regresaba sola a casa tras haber disfrutado de la celebración. Tenía solo 18 años. Sus últimos mensajes, su teléfono móvil, desparecido en un primer momento y encontrado después en el mar en Taragoña, la reconstrucción de los últimos pasos o las declaraciones que tomaron los investigadores, sin embargo, no permitieron esclarecer qué había sucedido con la joven.
La falta de pistas con el paso del tiempo fue tan acuciante que ocho meses después, en abril de 2017, el juez instructor, Félix Isaac Anido, decidía archivar provisionalmente la causa "por no existir indicios suficientes para dirigir el procedimiento frente a una persona determinada".
Habría que esperar hasta finales de ese mismo año para que se produjese otro hecho delictivo que precipitó el hallazgo del cuerpo de Diana y la detención de Enrique Abuín como autor confeso de la muerte.
Fue en los últimos días de diciembre de 2017, cuando una joven de la vecina localidad de Boiro denunció haber sido víctima de un intento de rapto y agresión sexual (por el que hoy en día está condenado 'El Chicle') y señaló a Enrique Abuín como el responsable.
Los agentes, que ya lo habían tenido entre los principales sospechosos del caso Quer, lo detuvieron entonces y lo interrogaron hasta que confesó haber sido el responsable de la muerte de la joven y los llevó hasta el cadáver.
El último día del año, el cuerpo de Diana Quer era recuperado de un pozo ubicado en el interior de una nave industrial abandonada en Asados, en Rianxo, próxima a la vivienda de los padres de su presunto asesino, 500 días después de su desaparición.
Retraso para conocer el veredicto por errores formales
Esta decisión llega después de que el magistrado Ángel Pantín decidiera devolver el veredicto este viernes al entender que existían errores formales, cuestiones que requieren una mayor fundamentación y posibles contradicciones en las consideraciones trasladadas por los miembros del jurado popular.
Según informaron fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, todas las partes del proceso estuvieron de acuerdo con la decisión del juez, una vez revisado el veredicto al que llegó este jueves el jurado popular y después de ponerse de acuerdo en las deficiencias que había que subsanar de cara a lograr un texto mejor fundamentado.
Las partes personadas en la causa judicial por el crimen de la joven Diana Quer habían sido citadas este viernes a las 10.00 horas en relación al veredicto del jurado popular, que fue entregado al juez. Este veredicto, que debe determinar el grado de culpabilidad del único acusado, Enrique Abuín, alias 'El Chicle', llegó tras dos días de deliberación en los que los nueve integrantes del jurado han permanecido juntos y aislados.
Subsanar deficiencias
La ley indica que cuando el magistrado presenta dudas sobre que el veredicto de un caso con jurado popular cumpla los requisitos legales debe citar a las partes para conocer su criterio al respecto, que este viernes han tenido cerca de media hora para analizar las consideraciones.
Posteriormente, se ha discutido entre las diferentes partes para ponerse de acuerdo sobre las deficiencias presentes en el veredicto que era necesario subsanar y que el juez ha detallado por escrito "de forma pormenorizada".
Estas deficiencias han sido desde errores de carácter material a casos de contradicciones y cuestiones que requerían de una mejor motivación por parte del jurado, que ahora deberá volver a reunirse para redactar un nuevo veredicto en el que se solventen las dudas trasladadas por el magistrado.