DEBERÁN ENTREGAR PRUEBAS DE LA ADOPCIÓN
Las familias españolas han llegado a los juzgados a primera hora de la mañana acompañados un día más por el cónsul de nuestro país. Han acudido a una vista de 45 minutos aún con el dolor de haber tenido que separarse de sus hijos.
En esta comparecencia el Ministerio de Asuntos de la Mujer (MOWA) de la región del Sur, la de origen de los niños, sólo ha insistido en un argumento: Mikel y Mario no son adoptable. El juez les ha explicado que deben presentar pruebas de la adopción, por ellos les ha citado de nuevo para la semana que viene para que presenten las pruebas que dicen que tienen y que no han presentado en los dos meses que llevamos de juicio.
"Creo que nos están 'toreando'", asegura con decepción Jerónimo Moltó, uno de los padres adoptantes. Además ha añadido " El MOWA está intentando retrasar el proceso, nos están mintiendo. Están con un problema político grave, porque quieren frenar la adopción internacional".
Las dos parejas adoptantes, Rubén y Sonia y Jerónimo y Silvia llevan ya más de cuatro meses en Etiopía y sus ilusiones empiezan a apagarse. "Si yo llego a sospechar que vamos a vivir esta situación, no hubiera empezado el proceso" afirma con dolor Sonia Alonso una de las madres adoptantes. Hace esta afirmación porque piensan que van de mal en peor: "Ya ni siquiera tenemos a los niños con nosotros. Y ya sólo piensas: "¿Estará llorando?¿Estará comiendo?¿Se habrá despertado de la siesta y no nos verá y se habrá puesto a llorar?'".
Los próximos pasos de estas parejas es reunir más documentación y conseguir la declaración de adoptabilidad de unos niños separados ahora a 400 kilómetros de sus padres.