Narcotráfico
Tras la denuncia presentada por la familia del fallecido, el juez ha citado a declarar en el mes de mayo a los dos agentes. La Fiscalía considera que no hay pruebas para que se les investigue.
El Juzgado que investiga los hechos ocurridos en el río Guadalquivir, donde el ocupante de una narcolancha murió tras colisionar con una embarcación de la Guardia Civil en Sanlúcar de Barrameda, ha citado a declarar como investigados a dos agentes tras la denuncia presentada por la familia del fallecido.
Los hechos se remontan a finales de enero, cuando la embarcación de la Guardia Civil se aproximó a la narcolancha, que se encontraba cargada de bidones de gasolina en la zona de desembocadura del Guadalquivir, y acabó colisionando contra ella tras una supuesta maniobra de huida de la neumática. A bordo de la embarcación viajaban otros tres hombres que no fallecieron y fueron detenidos. Están investigados por delitos de narcotráfico, además de una supuesta responsabilidad por la maniobra evasiva de huida de la Guardia Civil que terminó con el accidente.
La familia del fallecido presentó una denuncia contra la Guardia Civil por homicidio imprudente, argumentando que los cuatro tripulantes estaban descansando y dormidos en la lancha hasta que despertaron tras la colisión de la embarcación de la Benemérita. Esta denuncia es la que ha provocado la citación como investigados de los dos agentes, al ser una causa distinta contra los detenidos como supuestos responsables de delitos de narcotráfico.
Por su parte, la Fiscalía ha pedido la suspensión de la declaración de los agentes, citados para mayo, hasta que se conozca el informe pericial de los técnicos sobre la colisión.
Estas imputaciones se producen el día e n que la Guardia Civil ha dado un golpe a la logística del narcotráfico en Andalucía, en el marco de la operación 'Arrow'. Han sido detenidas 63 personas por su implicación en el narcotráfico en el litoral andaluz y en el cauce del río Guadalquivir. Además se han intervenido 13 embarcaciones y han aprehendido 12.324 kilogramos de hachís y 634 kilogramos de cocaína.
La operación arrancó a principios de este mes con el fin de combatir con organizaciones de narcotraficantes andaluzas. Durante el trascurso de la misma, se han aprehendido 12.634 litros de combustible, lo que supone una merma en las capacidades logísticas de los grupos organizados dedicados al narcotráfico, quienes utilizan pequeñas embarcaciones para abastecer de combustibles y víveres a las embarcaciones de alta velocidad que permanecen durante largos períodos de tiempo en el mar con el objetivo de disminuir el riesgo de ser interceptadas.
La operación, que continúa abierta, cuenta con la participación de diferentes unidades de la Guardia Civil, tanto marítimas como terrestres y aéreas, pertenecientes a las Comandancias de Algeciras, Almería, Cádiz, Granada, Huelva, Málaga y Sevilla, al Grupo Marítimo del Estrecho, al Centro de Coordinación y Vigilancia Marítima de la Guardia Civil, al Servicio Aéreo y al Grupo de Acción Rápida.