Operaciones policiales
Se trata de la operación "Xelinsulam-Albacares", con la que se ha desmantelado una organización criminal asentada en Cantabria que llegó a blanquear 1,5 millones de euros.
La Guardia Civil ha detenido a quince personas y ha intervenido casi 2,5 toneladas de cocaína en el Puerto de Algeciras (Cádiz). Estas cantidades de droga se encontraban ocultas en latas de atún dentro de un contenedor procedente de Ecuador, en el marco de una operación que se inició contra un entramado criminal localizado en Castro Urdiales (Cantabria). En un comunicado de la Guardia Civil se ha informado de que la intervención forma parte de la operación "Xelinsulam-Albacares", donde también se acusan a los responsables de blanquear 1,5 millones de euros por medio de cuentas bancarias y en neobancos, así como varios inmuebles.
De esta forma, los agentes de la Guardia Civil han conseguido vincular la organización que se originó en Cantabria con una investigación en curso que se estaba produciendo en Algeciras, en donde se detectaron esos 2,458 kilos de cocaína ocultos en latas de atún que provenían de Ecuador. Los investigadores recaudaron los suficientes indicios para imputar la detención de esas cantidades de cocaína a esta organización, al mismo tiempo que arrestaron a tres sociedades mercantiles. Esta investigación ha sido desarrollada de manera coordinada en cinco provincias distintas (Cantabria, Bizkaia, Guipúzcoa, Madrid y Valencia).
El cómputo de la operación podría estar valorado en 87 millones de euros
En los registros se encontró un laboratorio de corte de cocaína en el que se detectó todo el material necesario para la manipulación de la droga, además de 600 gramos de cocaína en roca, varias armas de fuego, cantidades menores de hachís y de anfetamina, 20.000 euros en efectivo, tres vehículos de alta gama y un cuarto vehículo de gran valor que tenía un señalamiento policial por sustracción. En total, la investigación realizada apunta a que el valor de la droga intervenida asciende a más de 87 millones de euros.
En febrero de 2022 comenzó la operación, cuando los agentes detectaron en un primer momento que existía el entramado criminal asentado en Castro Urdiales (Cantabria), que se dedicaba a la estafa masiva de entidades bancarias. Los investigadores detectaron que esta organización criminal había traído a un grupo de personas procedentes de Colombia con la idea de formar un núcleo de seguridad y de establecer la logística necesaria para llevar cocaína por el Puerto de Algeciras.