DE ORIGEN SUBSAHARIANO
En una nota de prensa, la institución cree que se trata de "un detalle relevante", aunque reconoce que es "escabroso y polémico", si bien ha decidido difundirlo "por la relevancia demostrativa de las circunstancias que acompañan la extrema presión migratoria actual que vive Melilla".
En la patera viajaban unos treinta inmigrantes de origen subsahariano, entre ellos tres mujeres, una embarazada, y cuatro menores, dos de ellos de corta edad.
La Delegación del Gobierno ya apuntó en una nota de prensa anterior que la embarcación desatendió "toda orden" de las dos patrulleras de la Gendarmería de Marruecos que seguían a la patera para intentar interceptarla, y también hizo caso omiso a las llamadas al alto de los GEAS de la Guardia Civil.
El instituto armado, al comprobar la sobreocupación de la patera, "no tuvo otra opción que la de velar por su seguridad" para evitar "un posible naufragio u otras circunstancias con desenlaces lamentables".