Acoso sexual
Las cámaras lo grabaron todo. No entrará en prisión si no vuelve a delinquir en dos años, cumple su orden de alejamiento y notifica cualquier cambio de domicilio.
El hostelero vallisoletano acusado de tocar el culo a una de sus camareras se declara culpable y acepta cinco meses de cárcel por un delito de acoso sexual. Sin embargo, no entrará en prisión después de que el tribunal acordara la suspensión de la ejecución de la condena por un periodo de dos años.
Para evitar la cárcel, el hostelero deberá cumplir los siguientes requisitos: no delinquir en los dos próximos años, respetar la orden de alejamiento de 100 metros con la víctima, no comunicarse con ella y notificar cualquier cambio de domicilio.
La sentencia incluye también libertad vigilada para el acusado, que deberá garantizar su puesta a disposición del tribunal y quedará inhabilitado para ocupar cualquier profesión u oficio que conlleve un contacto directo con menores de edad durante los próximos tres años.
Es una de las frases con las que el acusado de acoso sexual se dirigía a la camarera. Frases como "Ven, dame cariño" o "qué culo más bonito", que terminaron convirtiéndose en tocamientos sin ningún tipo de consentimiento.
Fue en febrero de 2022 cuando al hostelero tocó el culo de la camarera, que se encontraba de espaldas utilizando el microondas en la barra del bar.
Además, la camarera fue despedida en marzo tras coger una baja laboral como consecuencia de estos hechos.