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Barcelona

Un hombre, condenado a más de un año de cárcel y 20.000 euros por el volumen de su música electrónica en casa

El hombre estuvo durante cinco años poniendo música electrónica muy alta, ignorando las quejas de sus vecinos, que sufrieron el agravamiento de sus problemas de salud.

Hombre escuchando música en casaFreepik

Si vives en una comunidad de vecinos sabrás que, en ocasiones, la convivencia puede ser complicada. Si no todos, la gran mayoría de los conflictos que surjan estarán relacionados con el ruido. El sonido de la ducha por la noche, los ladridos de un perro o el ruido de unos tacones a primera hora de la mañana son cosas que pueden molestar a nuestros vecinos. Escuchar música a todo volumen también puede considerarse una falta de respeto.

De hecho, así lo consideraron los miembros de un vecindario de El Masnou, un pueblo costero catalán muy próximo a Barcelona, que denunciaron a uno de los vecinos por poner la música muy alta. Durante cinco años estuvo escuchando música electrónica a todo volumen. No le importaba si era de día o de noche, y mucho menos si era un día laboral o un fin de semana. Ahora, este hombre está condenado a un año y tres meses de cárcel.

Casi se duplicaba el nivel de decibelios permitidos

Entre 2012 y 2017 los vecinos del acusado llamaron a la Policía local en varias ocasiones para que interviniera. En octubre de 2014 las autoridades evaluaron las molestias y la Diputación de Barcelona elaboró un estudio sonométrico y demostró que el volumen de la música casi duplicaba los límites permitidos por la normativa medioambiental. Estos límites se fijan en 35 decibelios por el día y 30 por la noche y en el estudio realizado se registraron picos de entre 54 y 56 decibelios.

Tras esto, el caso llegó a los tribunales en el año 2015. Ahora, el juzgado penal número dos de Mataró (Barcelona) a condenado al hombre a un año y tres meses de cárcel por un delito contra el medio ambiente por la contaminación sonora.

La sentencia confirma que el volumen "excesivo" de la música provocó "importantes molestias" en el domicilio de al lado. "Es evidente que los actos cometidos por el acusado han causado un daño a los perjudicados, alterando su régimen de vida normal provocándoles un estado permanente de ansiedad", se detalla.

La salud de los vecinos se vio afectada

El exceso de volumen provocó vibraciones en las paredes y los objetos. Pero, lo que más agrava el caso es que la música tan alta ha provocado importantes problemas de salud a los inquilinos del edificio, que tuvieron que someterse a terapias hipnóticas y sedantes para soportarlo.

"La enfermedad degenerativa que sufría una de las víctimas empeoró"

La sentencia

Además los vecinos que contaban con afecciones previas, como por ejemplo Alzhéimer, empeoraron por culpa del estrés que generaba el volumen de la música. "La enfermedad degenerativa que sufría una de las víctimas empeoró por culpa de la ansiedad que le provocaba el ruido", recoge la sentencia.

Por todo ello, el condenado, además de enfrentarse a la pena de prisión, tendrá que indemnizar con 18.000 euros a tres vecinos y deberá pagar una multa de 2.166 euros. La sentencia dicta también que el hombre quede "inhabilitado para ejercer cualquier profesión que esté relacionada con la música electrónica".