ENCUESTA DE LA POBLACIÓN ACTIVA
Un total de 275.300 mujeres estaban trabajando el año pasado a tiempo parcial para poder cuidar de familiares que dependían de ellas, frente a 7.900 hombres que tomaron esta decisión, es decir, por cada hombre que asumió estas condiciones laborales para atender fundamentalmente a los niños, pero también a mayores o enfermos en casa, hubo 35 mujeres que lo hicieron.
Son los datos que arroja la submuestra de la Encuesta de Población Activa (EPA) difundida este jueves por el Instituto Nacional de Estadística, que cifra en 283.200 los ocupados que en 2014 estaban a tiempo parcial para poder atender a los suyos.
En general, se ha producido una reducción del 12,1 por ciento en los trabajadores a tiempo parcial para cuidar de dependientes, sin embargo, la reducción es más acusada entre los hombres, que han menguado un 51 por ciento pasando de ser 16.900 ocupados en esta situación en 2013 a los citados 7.900 de 2014.
Más del 97% de estos trabajadores son mujeres y el grupo más amplio, 175.100, tienen entre 35 y 44 años de edad. No obstante, también hay 66.300 jóvenes menores de 35 años (1.800 tienen entre 16 y 24) que reconocen haberse acogido a un empleo parcial para poder cuidar de personas que dependen de ellas, y 33.900 mayores de 45 que están en la misma situación.
En el 51,2 por ciento de los casos, 141.000 mujeres, la razón de estar en el tiempo parcial es que "no hay o no pueden costear los servicios adecuados para el cuidado de los niños". Es un aumento del 8,4 por ciento respecto del año anterior, cuando fueron menos de 130.000 mujeres las que dieron al INE esta misma respuesta.
En 7.900 casos más, el 2,8% del total, lo que no hay o no pueden pagar estas ocupadas a tiempo parcial son servicios para mayores, enfermos o dependientes que están a su cargo. Figuran asimismo en la estadística 5.600 mujeres que señalaron ambas razones y otras 121.000 que indicaron la existencia de "otros motivos".
Para la secretaria de Igualdad de UGT, Almudena Fontecha, con esta encuesta "vuelve a manifestarse que las personas no quieren que el trabajo a tiempo parcial sea la modalidad para conciliar ni para atender a las personas en situación de dependencia" y "viene a constatar que todavía hay aún menos personas que lo eligen".
Fontecha incide en que "las mujeres no eligen el tiempo parcial para conciliar" y cuando lo hacen "no es una elección libre" porque "en muchos casos es la única posibilidad que tienen de trabajar", y llama la atención sobre las razones que esgrimen en la encuesta para denunciar que es la falta de servicios lo que las aboca a estas peores condiciones laborales.
"La encuesta lo que refleja es la realidad, un recorte del gasto público que ha ido directamente relacionado con la atención a las personas, y que las familias y sobre todo las mujeres, lo que queremos son servicios; ni rebajas fiscales, ni peores condiciones de trabajo ni una paguita, queremos servicios que hagan posible compatibilizar", asegura.
La experta añade que "nadie elige esto para conciliar". "El contrato a tiempo parcial no funciona porque no es la fórmula que queremos, queremos un trabajo a tiempo completo retribuido en condiciones, con derechos, y servicios que atiendan a las personas en situación de dependencia. Nadie, ninguna de nosotras, elige esto para conciliar.
Se puede dar una situación que no prevés y la solventas como sea, pero eso no es que lo hagas encantada de la vida", destaca Fontecha.