Disparo
Los hechos han ocurrido sobre las 11:00 horas de la mañana de este jueves. Una mujer que se encontraba en el lugar de los hechos también ha resultado herida aunque se encuentra estable.
Un hombre de 34 años ha fallecido este jueves por un disparo en una gasolinera de Badajoz. El trágico suceso ha ocurrido sobre las 11:00 horas de la mañana, concretamente un bar que se encuentra justo al lado de este establecimiento donde confluyen la conocida autopista de Badajoz y la carretera de Sevilla.
Varias personas que se encontraban en el lugar de los hechos escucharon las detonaciones y llamaron rápidamente a la policía local de la ciudad. Los agentes de la seguridad ciudadana de la Comisaría de Policía Nacional de Badajoz han acudido al instante a la gasolinera y han encontrado a un hombre de 34 años que presentaba heridas de gravedad por arma de fuego. Pese a los esfuerzos dados por los efectivos sanitarios trasladados para salvar su vida, el joven ha fallecido desgraciadamente en las inmediaciones donde se produjo el disparo.
Además, una mujer se encuentra actualmente herida levemente por los mismos hechos. Según ha informado el diario 'HOY', en estos momentos se buscan a tres individuos que han huido en un coche Fiat de color blanco. La principal hipótesis con la que trabajan los agentes para conocer el origen del disparo está en un posible ajuste de cuentas.
Se ha desplegado en la zona un gran dispositivo policial. Casi 30 agentes y una decena de coches policiales se encuentran actualmente en el lugar de los hechos para conocer qué ha podido ocurrir.
Las autoridades judiciales de la ciudad extremeña aseguran que la investigación está abierta. Se ha decretado el secreto de sumario.
En tan solo unas horas han coincidido dos casos de disparos en nuestro país. Los agentes de la Guardia Civil investigan también un triple asesinato ocurrido este miércoles en la zona de Gola de Pujol, en Valencia. Recibieron el aviso de que varios cuerpos estaban en una posición extraña al lado de un vehículo Volkswagen Passat. Confirmaron que los tres individuos, de origen colombiano, habían fallecido por el impacto de una bala. Uno de los cadáveres estaba dentro de un coche y los otros dos fuera del vehículo. La principal hipótesis es la de un ajuste de cuentas entre narcos.
Uno de ellos sería el cabecilla de un clan colombiano que sobrevivió el año pasado a un ataque contra su familia en el que murieron su padre y sus dos hermanos.
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