La mujer que ha degollado a su bebé de tres meses en el cementerio de La Villa de Don Fadrique (Toledo) sufría depresión posparto y "hablaba cosas incoherentes" antes del crimen, según ha declarado su hijastro, quien agrega que "tenía la cabeza loca".
Stevenson, hijo del marido de la mujer detenida por acabar con la vida de su bebé, ha explicado que la mujer no se había recuperado de la depresión después del parto y que "hacía cosas raras", como "encender velas negras".
También ha explicado que el marido de la supuesta filicida y padre del bebé se encuentra "muy mal" en estos momentos.
"No sé qué le ocurría, al parecer tenía depresión postparto y los médicos dijeron que era eso, pero al tiempo no se le pasó, y es como si tuviera un demonio en la cabeza", ha contado.
Ha sido la madre de la mujer, abuela del bebé fallecido, quien ha alertado a Stevenson esta mañana, después de que la mujer se llevase al menor de tres meses y ella le impidiera llevarse también a su otra hija, de tres años.
"Salí urgente al cementerio y allí me dieron lastimosamente la noticia", ha narrado el joven.
A pesar de los hechos, Stevenson ha explicado que la mujer "trataba bien" al bebé y que no entiende "qué le habrá pasado por la mañana" para llegar a cometer el crimen.
Por su parte, Manolo, el empleado el cementerio que ha descubierto el cadáver del bebé sobre el altar de la capilla, ha explicado que ha visto a la mujer entrar a la iglesia "con su bebé en brazos", "pegando voces y trastazos".
Cuando Manolo ha entrado a la capilla, acompañado de otra mujer, se ha encontrado al bebé degollado encima del altar.
"Ella se escapó con el coche, no sé adónde", ha señalado.
Manolo, también vecino de la supuesta homicida, ha explicado que la mujer "tenía problemas de toda la vida".
El Ayuntamiento de Villa de Don Fadrique ha decretado un día de luto por los hechos ocurridos y las banderas del Ayuntamiento ondean a media asta.