Bizkaia
La Ertzaintza ha abierto una investigación para esclarecer los hechos, ya que no se desveló ningún tipo de herida o golpe que probase "indicios de criminalidad".
Este domingo, los servicios de emergencia rescataban de la ría de Portugalete (Vizcaya) el cuerpo sin vida de una mujer. La Policía autonómica de recibía el aviso de un particular sobre las 4:30 horas de la madrugada, según ha confirmado el departamento vasco de Seguridad. El cadáver se encontraba a la altura del muelle de Churruca, pasado ya el Puente colgante.
Una vez rescatado el cuerpo, ha sido trasladado al servicio de Patología Forense donde se le practicará la autopsia. Además, la Ertzaintza ha abierto una investigación para esclarecer los hechos, ya que no se desveló ningún tipo de herida o golpe que probase "indicios de criminalidad". Por ello, las hipótesis que se barajan en estos momentos son un accidente o el suicidio.
Málaga
El pasado martes, 30 de agosto, la Policía Nacional hallaban el cuerpo sin vida de un joven de 21 años en un paraje natural de Málaga.
La familia había denunciado la desaparición un día antes, por lo que los agentes comenzaron la búsqueda. Primero se encontró el vehículo del joven, cerca del lugar donde fue localizado sin vida. Según han informado desde la Comisaría Provincial, el cuerpo presentaba "claros indicios de violencia" y una "herida de gran tamaño en la cabeza".
Al dar con el cadáver, se inició una investigación, que actualmente continúa activa, para poder esclarecer los hechos y poder determinar qué pasó y quién pudo llevar a cabo los hechos.
Ibiza
El mismo día que el suceso de Málaga, en Ibiza también aparecía el cadáver de una mujer de 60 años flotando en el mar. El aviso era dado por un particular sobre las 9:50 horas en la zona del Botafoc, según informaba el Instituto armado.
Las hipótesis de lo ocurrido apuntaban a que la mujer no sabía nadar y por eso se ahogó.
Castellón
A principios de agosto, un senderista encontraba el cadáver descuartizado de una mujer en el municipio de Alfondeguilla (Castellón).
Le faltaban numerosas partes del cuerpo como las manos, los pies o la mandíbula, que, se sospecha, le han sido arrancados por animales salvajes que se han comido parte del cadáver. Asimismo, la edad de la mujer oscilaba entre los 30 y los 50 años, por lo que, a pesar de que podría ser ella, no se trata de Marta Calvo, la joven asesinada en 2019.