SE DISPARAN LOS ROBOS A VIVIENDAS
Estos fortines privados ya no son cosa de excentricidades o superproducciones de Hollywood. Las puertas pesan casi cien kilos. Con un pequeño gesto, los baños y las habitaciones se blindan por completo. Una vez dentro, una pantalla táctil comunica con el exterior. Es el ojo que todo lo ve.
En los tres últimos años, los asaltos a casas se han disparado más de un 20%, unos 40 robos por cada 10.000 viviendas. En muchas ocasiones, los delincuentes prefieren robar con los dueños de la casa dentro. Consiguen de forma más fácil dinero, joyas o incluso las claves de las tarjetas de crédito.