Agentes muertos
Después de la muerte de los dos guardias civiles en el atropello de Sevilla, y la de los otros dos en Barbate el pasado mes de febrero, las asociaciones de guardias civiles hacen esta reivindicación.
El conductor del camión que se saltó un control y atropelló mortalmente a seis personas en Sevilla, ha pasado su primera noche en prisión. Está acusado de seis delitos por homicidio imprudente y varios por lesiones.
Fue durante un control de la Guardia Civil en la AP-4. Diecisiete agentes estaban buscando drogas y armas cuando el camión se acercó a ellos, se desvió hacia el arcén y seis personas murieron en el acto. Cuatro de esas personas eran ciudadanos que estaban en sus coches parados en el control. Los otros dos eran guardias civiles. Pertenecían a los GAR, el Grupo de Acción Rápida de la Guardia Civil. Estaban destinados en el campo de Gibraltar en la lucha contra el narcotráfico.
La Asociación Unificada de Guardias Civiles de Sevilla solicita una investigación a fondo de los hechos "para que no vuelvan a ocurrir", tal y como ha explicado su secretario de comunicación, Álvaro Gilabert, a Antena 3 Noticias. Ha aprovechado su intervención para resaltar que "esta unidad lleva tres compañeros fallecidos en menos de dos meses y eso no es normal", refiriéndose a los dos agentes asesinados en Barbate el pasado mes de febrero.
"Esta unidad lleva tres compañeros fallecidos en menos de dos meses y eso no es normal"
Por esta razón, su asociación reivindica que su profesión sea considerada de alto riesgo. "Queremos mandarle un mensaje al Gobierno: ¿Cuántos compañeros más hace falta que mueran para que esto se lleve a cabo? ¿Cuántos fallecidos hay que poner encima de la mesa?", ha concluido.
En estos momentos, tres agentes están heridos de gravedad. La capilla ardiente por los dos fallecidos se va a instalar esta tarde en Logroño, en la sede los GAR.
Mientras, continúa la investigación para esclarecer las causas del siniestro. Las autoridades están analizando el tacógrafo del remolque para verificar a que velocidad circulaba. El camionero ha dado negativo en alcohol y drogas. De momento, todo apunta a un accidente.
"Todo apunta a un accidente por un posible despiste, una posible somnolencia del conductor... aunque no iba solo, a esas horas probablemente la otra persona también iba desconectada de la conducción", ha explicado Gilabert.
La muerte de estos dos guardias civiles ocurre poco más de dos meses después de que dos guardias civiles murieran durante una operación contra el narcotráfico en Barbate (Cádiz), al ser arrollados por una narcolancha.
Los agentes fallecieron cuando, junto a otros cuatro compañeros, se dirigían a identificar a los ocupantes de varias narcolanchas que se habían refugiado del temporal en el puerto de Barbate. Mientras varios vecinos que estaban en el muelle les jaleaban, una de las narcolanchas pasó por encima de la embarcación de los agentes, mucho más pequeña.
Uno de los agentes fallecidos, de 39 años, pertenecía al Grupo Especial de Actividades Suacuáticas (GEAS), era natural de San Fernando (Cádiz) y tenía pareja y una hija. El otro fallecido, de 43 años, era agente del GAR (compañero de los ahora atropellados), nacido en Barcelona, casado y con dos hijos.
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