Bronce
La operación 'Bronz' ha finalizado con la desarticulación de un grupo criminal especializado en el robo y comercialización de metales. El material sustraído se localizó en una chatarrería de Bilbao.
La Guardia Civil de Navarra ha recuperado más de 10 toneladas de bronce robadas entre febrero y marzo de 2024 en una empresa de Viana (Navarra) valoradas en 100 000 euros. Los presuntos autores, cuatro varones de entre 21 y 34 años residentes en Pamplona, se enfrentan ahora a cargos por robo con fuerza y pertenencia a grupo criminal "dedicado y especializado —según explica la Guardia Civil—, en el robo y la comercialización de metales". Además, otro hombre de 47 años propietario de una empresa de reciclaje está imputado en calidad de investigado como autor de un delito de receptación.
Los autores utilizaron la técnica del butrón, que consiste en agujerear estratégicamente las paredes y el suelo o techo en este caso para acceder al interior de la nave industrial, para sustraer piezas de bronce de entre 20 y 50 kg. Con esta operación denominada 'Operación Bronz' se ha procedido a la desarticulación del "grupo criminal de nacionalidad rumana que operaba con una logística cuidadosamente planificada".
Los presuntos utilizaban vehículos ligeros para el transporte de las piezas robadas y contaban con una estructura piramidal liderada por un ciudadano de origen rumano con antecedentes en delitos similares.
Durante las inspecciones oculares realizadas en la empresa robada, los agentes recogieron herramientas utilizadas para perforar los muros, así como imágenes de las cámaras de seguridad que captaron algunos de los movimientos de los criminales. En su actuación ilícita sólo mostraron interés en las piezas de bronce e ignoraron por completo las oficinas administrativas de la empresa.
Las pistas acerca del material robado condujeron hacia una chatarrería en Bilbao, donde el bronce sustraído se encontraba almacenado en contenedores y oculto bajo sacos. Los agentes recuperaron 10.625 kilos de material y procedieron a la investigación del responsable del establecimiento por un delito de receptación tras comprobar que la empresa adquiría las piezas a sabiendas de su ilegal procedencia.
El análisis de las grabaciones de seguridad y de la documentación facilitada por la chatarrería reveló que los autores utilizaron identidades y matrículas falsas para intentar introducir el material en el circuito legal. Entre las evidencias se encontraron tickets de entrega, albaranes falsificados y las imágenes de los responsables durante la transacción. Los líderes del grupo fueron localizados en Pamplona, donde residían y organizaban las operaciones.
La 'operación Bronz' ha culminado con la recuperación del bronce sustraído y la desarticulación del grupo criminal. Los autores han sido puestos a disposición judicial, Juzgado de primera instancia de Instrucción N.º 2 de Estella (Navarra), enfrentándose a cargos por robo con fuerza y pertenencia a grupo criminal.
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