Narcotráfico
Durante la persecución, una de ellas acometió un golpe contra la embarcación de la Guardia Civil en la alerta de estribor, sin consecuencias graves para la tripulación.
Continúa el acoso de los narcotraficantes a la Guardia Civil en la costa andaluza. Este jueves, una patrullera del Servicio Marítimo de la Guardia Civil Río Belelle fue embestida por una narcolancha durante una persecución, sin que hubiera que lamentar heridos.
La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha reclamado al Gobierno a través de sus redes sociales "más patrulleras y más personal", así como la implantación de la Zona de Especial Singularidad.
En ese sentido, Ibón Domínguez, portavoz de Jupol, ha pedido que tanto Policía Nacional como Guardia Civil sean reconocidas como "profesiones de riesgo".
El alcalde de Manilva, José Manuel Fernández (PP), había pedido a la Subdelegación del Gobierno "actuaciones inmediatas" para acabar con la presencia frente al litoral de la localidad de hasta once lanchas utilizadas presuntamente para el narcotráfico, que fueron grabadas con sus móviles por numerosos vecinos en la playa de Sabinillas.
Una patrullera del servicio marítimo de la Guardia Civil en Algeciras, se desplazó a la zona, lo que provocó que las narcolanchas, que se concentraron frente a Manilva para capear el temporal, se dispersaran y huyeran de la zona. Sin embargo, según la AUGC, una de las embarcaciones sufrió problemas mecánicos que le impedían navegar con rapidez, por lo que la patrullera se dispuso a interceptarla.
Ante esta situación, varias de las narcolanchas, para evitar la detención de los ocupantes de la embarcación averiada, embistieron de manera reiterada contra la patrullera de la Guardia Civil.
El pasado mes de febrero una narcolancha arrolló y mató a dos guardias civiles en Barbate (Cádiz) que operaban en una embarcación de menor tamaño y potencia que la utilizada por los narcos.
Los guardias civiles que fueron embestidos por una narcolancha, que acabó matando a dos de ellos, vieron el peligro, trataron de protegerse e intercambiaron frases como "van a por nosotros", "sacad el arma" y "disparad al aire".
"Dale con el foco", "cuidado atrás, uno con los ojos atrás", dice uno de los agentes, y poco después otro dice "van a por nosotros" mientras otro repite "disparad al aire". Se trata de unas imágenes grabadas desde la embarcación de los agentes durante el suceso.
La investigación del doble asesinato de Barbate aún sigue activa. Los agentes ahora están analizando el sistema GPS de las dos narcolanchas halladas, una la mañana siguiente y la otra, dos días después. De igual forma, siete personas siguen en prisión provisional investigados por estos hechos.
Dos agentes de la Guardia Civil murieron y otros dos resultaron heridos después de que una narcolancha embistiera contra su patrullera en el puerto de Barbate. En este suceso ocurrió la noche del 9 de febrero en Barbate. Murieron dos agentes de la Guardia Civil. El primero era David Pérez Carracedo, tenía 43 años y estaba destinado en el Grupo de Acción Rápida (GAR), cuya base se encuentra en la Comandancia de la Guardia Civil de Navarra. El otro se llamaba Miguel Ángel González Gómez, tenía 39 años y pertenecía a los GEAS (Grupo Especial de Actividades Subacuáticas) en Algeciras.
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