UNA GRABACIÓN MUY REALISTA
El temporal de la semana pasada en la costa cantábrica nos ofrece imágenes como esta en la que una ola gigante sobrepasa el rompeolas, atraviesa la carretera y alcanza la altura suficiente como para inundar el salón de la casa del videoaficionado que lo grababa. Afortunadamente no se registraron daños personales.