CEMENTERIOS HONG KONG
Las tradiciones familiares en Hong Kong tratan de honrar a los muertos de la mejor forma posible. Algunos habitantes gastan grandes cantidades de dinero en ceremonias llenas de formalidades y en comprar tumbas privadas en los superpoblados cementarios hongkoneses.
El Gobierno de Hong Kong está buscando alternativas al problema de los funerales promoviendo "entierros verdes" e incitando a los residentes a renunciar a los entierros tradicionales.
La azafata C. Lau cuenta que cuando falleció su padre la familia decidió rendirle honores esparciendo sus cenizas por el Mar de China.E Pero el mar no es la única alternativa posible para combatir el problema. Los artesanos y empresarios han dado rienda suelta a la creatividad proponiendo alternativas sostenibles. Una empresa de diseño propuso un rascacielos de 15 pisos para llenarlo de restos humanos, mientras que un estudio de arquitectura presentó un proyecto de un crucero que podría almacenar 48.000 urnas en alta mar. Otra alternativa es crear entierros en realidad virtual, donde uno puede pasear, contemplar las vistas y caminar hasta la tumba para rendir homenaje a sus seres queridos.
La fundadora de Glazden, Zimon Chow, captura la esencia de los seres queridos en un remolino de color y cenizas, sellado para siempre dentro del arte del vidrio. "Intentamos conocer a fondo cómo fue la persona y darle forma en figuras de cristal", manifiesta Chow. Según la artista, cada vida es preciosa y merece ser honrada de una manera elegante y digna, por lo que se centran en hacer pocas piezas de manera exclusiva: "No queremos producir en cadena; es un trabajo artesanal y muy personalizado, por lo que, como mucho, admitimos cinco clientes al mes", apunta.