Vacaciones
La comunidad se afianza como destino estrella entre los que buscan temperaturas más frescas que en el sur de España
La gastronomía o la cultura son señas de identidad de Galicia, pero también lo son para muchos turistas sus agradables temperaturas durante todo el año. Hay quien, tratando de huir del calor, ve en la comunidad gallega un oasis en los meses de verano. Una realidad que se refleja en datos: las cifras para este verano prevén una ocupación que llegará al 100% en algunas zonas, según el Clúster Turismo de Galicia.
El mes de julio cierra, en este sentido, por encima de los 600.000 turistas, lo que supone un aumento del 28% frente a los casi 500.000 visitantes registrados en el mismo período de 2021. El sector confía en las reservas de última hora para mejorar los resultados, además de en los buenos datos del camino de Santiago.
Precisamente, en la capital gallega, se registran temperaturas medias que no superan los 30 grados, a pesar de que estamos inmersos en uno de los veranos más calurosos desde que existen registros. Los turistas ven en esta realidad una oportunidad para descansar de las extremas temperaturas y hacer turismo.
En este sentido, se consolida el conocido como ‘turismo de interior’, que pone en valor el paisajismo de pueblos con un interés y un atractivo semejante al de otros espacios más valorados en la actualidad. Es el caso, por ejemplo, de pueblos como Mondoñedo, Padrón o Piedrafita do Cebreiro.
Este último destino de la montaña lucense, conocido por sus blancos paisajes en los meses de invierno, se convierte también en un nuevo destino interesante para los amantes de deportes como el senderismo o el ciclismo. Desde asociaciones como el 'Geodestino Ancares Terras de Burón', que buscan dinamizar este tipo de espacios y entornos, animan a los visitantes a explorar “conociendo estas tierras en las que la naturaleza te envuelve y te invita a encontrar la paz de las montañas”.
Para la puesta en valor de estos espacios, esta asociación ha puesto en marcha iniciativas como un ‘pasaporte gastronómico’, con diferentes propuestas de fiestas y ferias de la comarca, o una red de micropaisajes: “pequeños espacios en torno a elementos singulares, naturales o artificiales, que componen una imagen agradable que atrae nuestra atención”.
En definitiva, una muestra más de que Galicia tiene mucho que ofrecer a todos sus de visitantes.